Estamos asistiendo a otra forma de corrupción, en plena crisis económica, social y laboral.
Se están anunciando despidos masivos de trabajadores en diversas entidades bancarias, mientras que sus directivos (Consejos de Administración) se aumentan unas retribuciones astronómicas. Por el contrario en el ámbito deportivo se están ajustando sus salarios entre un 10 y un 20% a las grandes estrellas del deporte futbolístico.
Ni ética ni funcionalmente es de recibo las retribuciones de los miembros Directivos de las Entidades Bancarias. De las pocas actuaciones decentes del Gobierno, hay que destacar la oposición frontal a estos sueldos estratosféricos. A ello hay que añadir el pésimo servicio a los usuarios de la banca. Las gestiones presenciales, se reducen al mínimo, quebrando la capacidad de los jubilados que desconocen las vías telemáticas.
Asimismo, en estos días, hemos tenido conocimiento que el Gobierno de la Nación, ha incrementado las subvenciones a las principales centrales sindicales, UGT, CCOO y CSIF en un 53% en un momento de paro galopante…
No les basta el fraude de los cursos de formación percibiendo cantidades astronómicas sino que además ahora se incrementan sus ingresos con las subvenciones para seguir viviendo sus cuadros a costa del erario público y de los españoles.
Después de los escándalos monumentales de los Sindicatos de clase, verdaderas organizaciones criminales, dedicadas a defraudar a sus afiliados y al Erario Público, el Gobierno de la Nación, mantiene e incrementa sus ayudas.
El escándalo de los Eres y el fraude en los cursos de formación, en lugar de tener la respuesta de disolución de unos sindicatos corruptos han recibido como premio más ayudas.
Es más necesario que nunca, la irrupción del nuevo amanecer de Manos Limpias, como único e independiente movimiento popular para atajar la corrupción que campa impunemente, dado que Manos Limpias fue criminalizada, lapidada tratando de aniquilarla para que su voz no pudiera denunciar unas Instituciones corruptas.
No quiero dejar de reseñar como los sindicatos de clase CCOO y UGT son utilizados y se dejan utilizar por su amo (el Gobierno de Pedro Sánchez), que les da de comer y les indica que antes de defender los derechos de los trabajadores, es prioritario apoyar a los secesionistas y dar el visto bueno a los indultos.
El aumento de subvenciones en un 53% a estos sindicatos corruptos es el peaje que deben aceptar a cambio de sobrevivir, puesto que las cuotas sindicales no les dan ni para tomar un café.
Mientras no se corte el grifo de esta corrupción sindical con el apoyo del Gobierno de Pedro Sánchez este país jamás podrá recuperarse y el índice de paro será el mayor de la Unión Europea.
Una de las primeras medidas que se deberían adoptar es el hecho de que las subvenciones a los sindicatos sería aportar esas subvenciones a la denominada caja de pensiones que está al borde de la quiebra.
Miguel BERNAD REMÓN
Jurista y Secretario General del Sindicato MANOS LIMPIAS
