La gran industria pagará un sobrecoste de más de 1.500 millones de euros por las subidas de luz y gas, según señaló hace unos días Fernando Soto, director general de la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (AECE), frente a lo que pagarán sus principales competidores europeos de Francia y Alemania. Y si hace dos semanas, algunas empresas ya detenían la producción durante las horas más caras, ahora Sidenor se ha convertido en la primera que ha anunciado que parará 20 días.
Sin embargo, otras siderúrgicas más grandes y que cotizan en el Ibex 35, ArcelorMittal y Acerinox, han celebrado en bolsa el aumento del precio de las materias primas, como el petróleo (el barril de Brent se ha situado en el entorno de los 84 dólares) o el hierro. Arcelormittal se anotó la mayor subida del selectivo español el pasado lunes, que ha sido del 4,34%, y Acerinox, la segunda, del 3,03%.
Todo ello el mismo día que la siderúrgica vasca Sidenor anunciaba que parará la producción durante 20 días hasta el próximo 31 de diciembre, lo que supone una reducción de su actividad del 30%, porque el coste eléctrico que soporta ya es un 300% superior al de hace un año y supone unos 200 euros más por tonelada, por lo que ha provocado que se elevaran los costes de la empresa en más de un 25%. Este impacto “provoca pérdidas y hace imposible mantener el ritmo actual de producción”, ha explicado Sidenor.
Con la parada durante 20 días, que afectará de forma inmediata a la planta principal de Basauri y progresivamente al resto de fábricas, la siderúrgica vasca intenta “limitar el tremendo impacto del elevado coste de la electricidad en su actividad”, aunque “no soluciona el problema de fondo, y otras medidas serán necesarias de persistir el actual panorama de descontrol en los precios eléctricos”. Y mientras, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, más cuestionada que nunca y manteniendo un pulso con las eléctricas, y la titular de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ni está ni se la espera a la hora de ayudar a la industria con sus costes energéticos y sigue sin viajar a La Palma después de la metedura de pata que tuvo hablando de la erupción del volcán como espectáculo maravilloso… será que no quiere salir quemada y más teniendo en cuenta la “política kleenex”de Pedro Sánchez.
Cristina Martín
Publicado en Hispanidad – 12/10/2021
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