Pocos sucesos en la historia de la humanidad – la historia de las almas – ocurren sin el concurso de las fuerzas ocultas, de la masonería.

Las sectas con un sentido esotérico repiten hechos anteriores sugiriendo que nada es casual sino causal.

Nos encontramos en fechas parecidas a una guerra, la del Yom Kippur – que se inició el 6 de octubre de 1973 – que, cinco decenios después parece calcada a la actual, cuyo objetivo inmediato es involucrar a diversos países musulmanes que representan para el consorcio israeloangloamericano un hipotético peligro.

El creciente peso del chiita Irán tanto en la guerra de Siria como en Irak y una supuesta posesión de armamento nuclear pone en riesgo – siempre según los analistas angloamericanos – la supervivencia del estado de Israel.

Para estas potencias las vidas no suponen ningún obstáculo siempre que sus intereses prevalezcan.

Con tal de llevar a cabo su guerra, Israel y siempre con la intención de ampliarla hacia otros lugares mas estratégicos que la banda de Gaza, no dudará en sacrificar los varios cientos de judíos en manos de Hamas, que, están ya sentenciados.

Petróleo, divisas, materias primas, inflación, tipos de interés…

Las guerras se sabe cuándo comienzan – y esta ya se ha iniciado – no se puede prever ni a qué países va a concernir después, ni cuando terminarán ni, por supuesto quién será el ganador.

Respecto al ultimo aspecto, hasta el día de hoy y, después de la segunda guerra mundial, los Estados Unidos han perdido todas las guerras emprendidas y siempre con resultados catastróficos…. Vietnam, Afganistán…

La del Yom Kippur representó un choque petrolero sin precedentes multiplicándose los precios, asistiendo a la vez a un boicot de los productores del golfo a los países intervinientes a favor de Israel y una crisis económica en el sentido de una inflación desbocada, créditos reducidos, tipos de interés desmesurados, bolsas hundidas…. En definitiva, el resultado de una guerra suele conseguir efectos devastadores para las familias, las pequeñas empresas, el tejido social que mantiene nuestras sociedades cristianas.

Esta última constatación es perseguida por las fuerzas ocultas cuyo propósito es destruir la sociedad y su tejido social sin importarles las vidas sacrificadas.

Los analistas y expertos económicos opinan que pocas veces las crisis se repiten, la intensidad no suele ser la misma y si llegan, las naciones – siempre según ellos – se encuentran preparadas para resistir mejor que en las anteriores…

Opino que, la intensidad será diferente, pero los países occidentales se encuentran ya sumidos en una crisis sin precedentes que, todavía, no se había manifestado. Crisis larvada y que los analistas conspiranoicos como este humilde servidor, venimos llamando la atención.

Crisis del mercado obligatorio, inflación, altos tipos de interés, deudas publicas gigantescas…

Desde hace varios meses alerto sobre la crisis que planea sobre nosotros y que no se manifiesta en forma de un cataclismo.

La inflación intensa y desatada surgió como consecuencia de la pandemia falsa y provocada del covid-19 cuyos confinamientos supusieron cierres empresariales y ceses en la producción de muchos materiales y productos – incluso muchas pequeñas y medianas empresas desaparecieron – de manera que, al volver a una situación normal, el dinero en circulación superó a la producción, desatándose una inflación de varios dígitos.

El BCE y la FED respondieron con subidas de tipos que, hoy alcanzan valores del 4,5%…

El mercado de obligaciones como consecuencia del alza de intereses y, sobre todo, en muy pocas semanas, se vino abajo arrastrando a valores públicos y obligaciones privadas provocando descensos en algunos casos hasta del 30%.

Estos descensos de las obligaciones provocaron la quiebra de varias aseguradoras entre ellas la italiana Eurovita y un perjuicio patrimonial en el sector de varios cientos de miles de millones de euros, que puso – y que se mantiene – a las compañías de seguros en un estado de coma financiero.

Lo mismo sucedió en Estados Unidos quebrando varios bancos, algunos de tamaño medio como el Silicón Valley Bank y otros de menor dimensión.

Hace unas semanas las autoridades monetarias americanas alertaban del estado de un millar de bancos en peligro de quiebra.

Recuerdo que, cuando veas las barbas de tu vecino pelar, pon las tuyas a remojar.

También en estos lares quebró el Crédit Suisse, un coloso centenario que la crisis de las obligaciones lo llevó al cementerio bancario.

Las instituciones bancarias más sólidas que nunca…

El BCE recuerda de Ramos a Pascuas que gozamos de sólidas – como rocas – instituciones bancarias a prueba de crisis…

Es cierto que la subida de intereses por el BCE supone un alivio de las cuentas de resultados de los bancos, pero, también la crisis de las obligaciones les ha supuesto que la valoración de sus activos en obligaciones ha disminuido – y siempre cada entidad es diferente -, del orden del 20%, de manera que todos los ratios calculados por el BCE, resultan equivocados para no emplear la palabra adecuada: falsos.

Cualquier nueva subida agresiva de tipos de interés puede reducir de inmediato el valor contable de la banca europea y llevarse al cementerio alguno, varios o muchos de esos sólidos bancos de la señora Cristina Lagarde.

Consecuencias de la guerra iniciada

El petróleo desde la apertura de mercados sube menos de lo esperado, alrededor de un 5% y se estabiliza en el entorno de 86 US§ el WTI. Sin embargo, sus derivados suben algo más, probablemente por los operadores que acaparan a la espera de un aumento mucho mayor.

En el último post comentaba la bajada de precios del gasóleo, consecuencia del aumento de los stocks rusos provocados por las sanciones de la Unión Europea, que consiguen que desde unas importaciones del orden del 60% pasemos al cero por ciento. Provocó una fuerte bajada en el precio del petróleo la semana previa a esta nueva guerra.

Mi opinión personal es que los precios del crudo WTI van a ir subiendo poco a poco o en algún caso con mayor intensidad en función del desarrollo de esta guerra, y sobre todo si los chiitas de Irán se involucran, y de este país islámico se puede esperar cualquier reacción drástica que, por supuesto, llevaría al petróleo a superar los 100 US§.

El resultado será una inflación mayor que requerirá de una subida dentro de unas semanas de tipos de interés

Anunciaba – varias veces – que tanto la inflación como las subidas agresivas de tipos de interés son provocadas y su origen se planificó años atrás, de manera que lo que ocurre – todo – no es fruto ni de una mala gestión ni torpeza de los que nos gobiernan, sino de un plan diabólico que pretende la ruina de nuestros países cristianos, de nuestras familias, de nuestros autónomos y de nuestras pequeñas empresas.

No pensemos que los gobiernos de la Unión Europea son idiotas o estúpidos sino perversos personajes luciferinos que siguen las órdenes de los que se encuentran detrás de las bambalinas.

¿A alguien normal se le puede ocurrir gastar sin límite y sea quién sea quién mande, derechas o izquierdas, ese gasto público aumente sin parar?

Y de manera simultánea aumentan los impuestos hasta límites confiscatorios… nada es normal ni sigue lógica alguna, sino que todo, al repetirse las mismas recetas en diferentes países, supone que los corruptos y perversos gobernantes siguen las instrucciones del Nuevo Orden Mundial o llámenlo si quieren sectas masónicas, poderes ocultos, que tiran la piedra – muchas piedras – y esconden su mano.

Divisas, bolsas y oro

De momento el mercado de divisas se ve libre de convulsiones, pero cualquier choque del petróleo llevará al patito feo de las divisas, el euro, a un descenso que lo pondrá por debajo de la paridad con el dólar USA.

La Unión Europea, va a apoyar hasta sus ultimas consecuencias a Israel y los efectos de esta postura absurda – por supuesto buscada y provocada – conseguirán una acción doble, por un lado, un descenso del euro y por otro, una subida brusca de intereses para defender la moneda y combatir la inflación.

Escribo y repito, buscada y provocada porque la UE, con todas las evidencias, no necesita de ninguna manera jugarse el futuro apoyando a Israel.

El apoyo va a tener consecuencias desagradables sobre todo si ocurre un boicot de los productores petroleros a los que apoyen a Israel como ya ocurrió en 1973… la historia se suele y puede repetir.

El oro

De las materias primas el solo y único refugio cuando suceden las catástrofes es el metal dorado, que vengo recomendando con insistencia.

Recuerdo que el oro NO produce interés alguno y ese es su único hándicap.

Y otro detalle que repito y repito, es una inversión y como tal está sujeta a oscilaciones, en cristiano, a descensos y, cuando invertimos en un activo, lo central es NO PERDER.

En el caso del oro, su límite mínimo son los 1.650 US § del coste de producción de una onza, de manera que con un 100 % de posibilidades, no bajará por debajo de ese precio.

Hacia arriba, su precio, en principio y exagerando algo, no tiene techo y puede alcanzar cualquier valor porque las divisas que luchan contra el oro, NO valen nada.

Las letras del tesoro

Ante los tipos elevados de estos activos del Tesoro – enorme paradoja – recomendaba hace varias semanas, comprarlas como inversión a corto plazo… HOY, sigo pensando lo mismo, pero, si usted amigo lector, dispone de ahorros, espere un par de semanas ya que los tipos van a volver a subir. Y no olvide en ningún caso comprar letras del Tesoro por encima de 12 meses. NUNCA, porque los tipos pueden ir subiendo y, a la vez el euro se va a ir hacia abajo…. Piénselo antes de adquirirlas.

Las bolsas

Con un descenso del 2% el pasado lunes, parecía que iban a tomar un camino bajista que corresponde a las cotizaciones – de acciones – con tipos de interés del orden del 4,5% y con rendimientos casi siempre bastante inferiores.

Los índices de las principales bolsas se mantienen por encima de los precios anteriores al covid-19 y solo esto, si reflexionamos un poco, NO SE TIENE de PIE… porque durante el covid-19 los tipos eran próximos a CERO…

El lector se dará cuenta de que algo falla en las bolsas… por eso recomiendo, por supuesto, NO COMPRAR NADA y en principio, ir vendiendo poco a poco las acciones porque el SUSTO va a llegar en cualquier momento. Lo verdaderamente curioso es que, todavía, no se haya roto la cesta, léase bolsa.

Gracias por la lectura

DIOS, PATRIA y REY LEGITIMO

 

Iñigo Caballero

I. Caballero