En la Catedral de San Luis, Argentina, Diócesis gobernada por décadas por un gran Pastor, Mons. Laise (QEPD) que dió muchísimos frutos, lleno de vocaciones sacerdotales y religiosas con laicos comprometidos y ejemplares familias católicas, el pasado viernes 29 de octubre participaron en un encuentro interreligioso por la paz representantes del culto sincretista espiritista Umbanda o la  Escuela Científica Basilio entre otras confesiones.

A los que nos formamos en nuestra infancia con el catecismo del Padre Astete se nos quedó grabado que el Alma tiene tres enemigos: el Mundo, el Demonio y la Carne, y hoy parece que algunos eclesiásticos de la Iglesia Católica, la Iglesia de Cristo, se han olvidado de tal enseñanza, pues no tienen otro afán que agradar al Mundo ofreciendo las concesiones que este propone: desacralización del Culto y los Templos, desvirtuación del Sacerdocio, deformación o abandono de rituales y sacramentales…, hacerse guays ante quienes están en contra de Cristo y de Su Evangelio, por mucho que quieran vender la moto de que con la modernización van a acercar a las masas a la Iglesia. Ya se intentó con el aggiornamento postconciliar… y se vaciaron las iglesias ¿Es que no aprendemos o es que algunos han aprendido demasiado bien?

En el vídeo colgado en el Facebook de  la Diócesis de San Luis se puede escuchar, al principio del vídeo la relación de participantes. Curiosamente, si vamos al final del vídeo, no observaremos al Sr. Obispo de la Iglesia de Cristo, Mons. Barba, dando la bendición final, está cortado justo antes:

Para ver vídeo pinchar AQUÍ

no obstante sí que podremos verlo en este otro vídeo captado por cámara, al parecer, no oficial de la Diócesis:

Aquí vemos como Mons. Barba imparte la bendición “En el nombre del Padre… y del Espíritu Santo”, saltándose al Hijo, nuestro Señor Jesucristo, Dios hecho Hombre para la Redención de todos nosotros, pecadores.

«Por todo aquel que se declare por mí ante los hombres, yo también me declararé por él ante mi Padre que está en los cielos; pero a quien me niegue ante los hombres, le negaré yo también ante mi Padre que está en los cielos (Mt 10,32-33)».

Pobre Monseñor, y por desgracia tantos y tantos como él, que niegan a Nuestro Señor ante los hombres olvidando que Él es «…el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por mí» ¿Dónde llegaréis en vuestro caminar en esta vida?

Esto es un ejemplo práctico, nos tememos que no único y aislado, del falso ecumenismo y de las intenciones que se están  imponiendo para diluir la verdadera Iglesia de Cristo en una religión única mundial y ecuménica, masterplan satánico de la agenda 2030 del anticristo.