La rendición de la Iglesia

 

San Pablo en 2 Tesalonicenses 2:

… respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo…  en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

Insistimos en que la segunda venida de Jesucristo Nuestro Señor se encuentra cerca y como escribe San Pablo:  … tanto que se sienta en el templo de Dios, como Dios, haciéndose pasar por Dios.

La Iglesia – pero NO la de Jesús, al pie de Lucifer

Hace poco más de un par de años escribía en otro medio que dos tercios de los cardenales y obispos de la actual iglesia – con minúsculas – se encontraba adscrita a la masonería. Un lector respondía en sus comentarios airado expresando su malestar por mi afirmación. No le contesté y HOY, convencido estoy que ese número no refleja la situación de la iglesia pues creo que cerca o puede que más del ochenta por ciento de los cardenales pertenece a la iglesia de Lucifer.

A veces no nos detenemos para reflexionar ni siquiera unos pocos minutos y seguimos con nuestra rutina que nos impide ver la terrible realidad. Los cambios en la Iglesia son paulatinos y no nos percibimos de su gravedad.

Incluso hasta nos quejamos de hechos puntuales sobre lo que dice o deja de decir tal o cual obispo o cardenal. Que si la Conferencia Episcopal recomienda o no ciertas cosas, sucesos o hechos y que si la COPE sedicente medio episcopal se encuentra tomada por nuestros enemigos.

Decenios atrás mi difunto padre leía La Croix órgano del catolicismo francés y de sus obispos. Siguiendo la tradición familiar continué leyendo el diario en digital hasta que me di cuenta de que era un panfleto alejado de la FE de Cristo y podía compararse a cualquier otro medio de los oficiales de la mentira y la subversión del orden cristiano.

Lo mismo se puede decir de las noticas que proceden del Vaticano y que dejas de leerlas porque o te desesperas de tantas incongruencias o crees que es mejor desaparecer de este mundo de locos.

Por el lado de la Revolución se comprueba que avanza tomando todos los baluartes que quedan y destruyendo en el camino la familia, la FE, promoviendo el aborto, el divorcio y la satánica ideología LGTBI… sin que los que, en teoría, deberían defender a muerte nuestro Ideario Sagrado muevan un solo dedo ni alcen sus voces. Silencio sepulcral y total.

La Conferencia Episcopal Española adopta una complacencia con el poder y se coloca al lado del PePé como si fuera nuestra tabla de salvación.

La toma de posiciones a favor de ese partido abortista, liberal y anticristiano no sorprende a la inmensa mayoría de fieles, que consideran normal que la CEE se posicione a favor de un partido de derechas, pero SÍ a los que nos detenemos a reflexionar y nos preguntamos los porqués. La verdadera Iglesia de Cristo en ningún momento puede apoyar la ideología del PePé porque es lo más alejado de nuestro Sagrado Ideario y adopta, además, la Agenda 2030 que según palabras de uno de sus destacados miembros, Margallo, es como su Evangelio…

Que unos obispos católicos apoyen y se movilicen a favor de unas ideas opuestas a nuestra FE nos provoca náuseas y un pensamiento en el sentido de que nadie como católico puede sostener unas ideas contrarias a nuestra FE.

Se van aprobando leyes, y muchas leyes, que van contra nuestro Credo sin que los obispos abran sus bocas. ¿Acaso es timidez? ¿O siguen consignas que vienen de Roma? Siempre, siempre la verdadera Iglesia de Cristo se ha opuesto y se ponía de frente respecto a leyes injustas, criminales o a favor del mal.

Timidez, consignas, maldad o ignorancia

La verdadera Iglesia desaparece bajo nuestros atónitos ojos sin que nadie, ningún obispo o cardenal comparezca. Silencio.

¿Han dimitido de sus cargos? ¿Acaso se encuentran enfermos? ¿Para qué se les nombra obispos o cardenales? ¿Es por la vestimenta? ¿Es por la vanidad de ostentar la mitra?

Lo cierto es que la Iglesia desaparecida por completo pareciera que no existe. Como los reyes, ¿la Iglesia ha abdicado? ¿Ha dimitido?

¿De verdad estos obispos saben lo que hacen?

¿Acaso se resignan a que la civilización cristiana y su Ideario Sagrado desaparezcan?

Señores obispos, ¿no se dan cuenta de que la desaparición de la Iglesia de Cristo conlleva la desaparición de la humanidad y la muerte del espíritu del hombre?

¿No van a mover un dedo para impedirlo?

Claro parece que siguen la línea muy recta del Concilio Vaticano II que propuso acercar a la Iglesia al mundo… la consecuencia es que el mundo ha devorado a la Iglesia y, de tal manera que se le aboca a la desaparición.

¿Y la Iglesia autonómica?

Para mayor inri los obispos españoles o buena parte abandonan el concepto, al parecer solo histórico, de españoles para comparecer unas nuevas iglesias aceptadas por la Conferencia Episcopal como iglesia catalana, iglesia vasca y las que vendrán…

Muy lejos queda esa C. E. que se oponía al comunismo, al socialismo a todas las desviaciones, herejías e incluso defendía la unidad de España… ideas viejas a dimitir de ellas porque lo trascendental NO es el Credo ni la FE sino el acercamiento al mundo, al mundo que te traga y devora.

Suponemos que entre esas muchas decenas de obispos pasmados hay unos cuantos, de mala fe, otros ingenuos y otros idiotas. No seré capaz de diferenciarlos y distinguirlos, pero sean lo uno o los otros, para los católicos que nos resistimos al avance de nuestros enemigos y nos oponemos con nuestra FE, la ayuda de Cristo, de la Virgen María y de San José a cualquier herejía y perversión, estos individuos mal calificados como obispos y cardenales NO lo son, sino unos miserables cobardes al servicio de Lucifer.

Benedicto XVI

No hay palabras ni frases para calificar – ahora ya difunto – su inmensa cobardía por dimitir sin contarnos la verdad, la única verdad posible que podemos ahora sospecharla pero impropia de un sucesor de Pedro confirma la dimisión de toda la iglesia, llegando esa dimisión inconcebible e increíble hasta el papado.

La excusa, la de siempre, enfermo y viejo… que NO le impidió seguir con vida y viviendo casi diez años más desde su abandono del papado. La historia del viejecito enfermo que no se enteraba de nada se repite con demasiada frecuencia.

Cuando llevas el timón de la Iglesia de Pedro que es la de Cristo NO, abandonas la nave por causa alguna, solo la muerte.

Que el mal venía de lejos y no era de ese 2013 sino que ya desde Pablo VI – por lo menos – y su célebre humo de Satanás, el demonio se había colado en todas las instituciones y varios cardenales, media docena o quizás más, ocupaban los puestos más altos en la Iglesia.

El cardenal Gagnon, creo que el último sacerdote de Cristo, fue el encargado de redactar el dosier sobre el famoso humo, desvelando con nombres y apellidos los cardenales masones… la respuesta de Pablo VI fue la habitual… estoy viejo y enfermo que tome las medidas necesarias el nuevo Papa….

Pues el nuevo Papa, los del humo de Satanás se lo cargaron en 33 días – les suena la música… – y como escribimos mil veces y una, cuando alguien lo suicidan es que es bueno, muy bueno… apliquen la regla de tres, la misma regla cuando alguien es del equipo de los malos, pues vive hasta los noventa y pico años y puede que mas (sin ir muy lejos Enriquito Kissinger, un siglo…) o el mismo Benedicto, 95, y, además, muere en su cama sin que nadie le moleste.

Reflexionen y que la regla del asesinato/crimen se aplica solo a los buenos, a los verdaderos discípulos de Cristo, los malos… nunca mueren.

El tercer secreto de Fátima

Debería desvelarse hace varios decenios sin que sepamos su auténtico contenido que los sucesivos Papas nos lo han desvelado como si fuera una novela por entregas.

El secreto nos concierne a todos los católicos y debe sacarse del misterio a la luz para que se confirme lo escrito por San Pablo en 2 Tesalonicenses 2:

(Perdonen la repetición pero es trascendental):

… porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

La Iglesia en ningún momento ha desmentido el anterior escrito de Pablo de manera que las pruebas son contundentes y el párrafo no parece una profecía sino una realidad.

Respecto a Lucia, la última vidente de Fátima algunos complotistas sostienen que la auténtica Lucia fue asesinada y reemplazada por una doble obediente a las instrucciones superiores… es posible.

Todas las suposiciones apuntan a que el humo se ha apoderado de la Iglesia en su práctica totalidad.

La frase hecha de que la excepción confirma la Iglesia en el caso de la española, el obispo donostiarra Munilla es el último de Filipinas de la FE de Cristo, recemos para que la regla del suicidado no se cumpla en Munilla y siga defendiendo nuestra FE como lo hizo en el pasado y en el presente.

Paralelismo con la iglesia falsa de Inglaterra

Es sorprendente lo sucedido en la Inglaterra de los años 1600 cuando su monarca Enrique VIII decidió crear la satánica iglesia de Inglaterra y separarse de Roma, el pueblo inglés, sus sacerdotes y obispos eran católicos… pues todos, con sus sacerdotes y obispos se pasaron al demonio. La lucidez de Tomás Moro se opuso y acompañado solo por el obispo Fischer de Rochester sufrieron ambos el martirio y derramaron su sangre por su FE… ¿Serán capaces nuestros obispos de inmolarse por Cristo? Nadie aparte Moro y Fischer denunciaron la falsedad evidente de la nueva religión.

Ahora nos encontramos ante una nueva religión falsa que poco a poco introducen desde Roma sin que nos apercibamos ya que lo hacen poco a poco al mismo tiempo de la masonería y el judaísmo Kabbalístico se encargan de la demolición de la sociedad tradicional.

Coexisten y concertadas dos maniobras, la religiosa destruyendo el Dogma y la Liturgia y de manera simultánea la política con sus leyes perversas y anticristianas preparan el advenimiento de una Dictadura con una religión nueva que será la de Lucifer como dios único y desde la usurpación de la sede de Pedro en Roma.

La relación de la iglesia anglicana del siglo XVII y la de la iglesia de Roma es coincidente y paralela ya que en Inglaterra hubo solo dos mártires… cuántos obispos había entonces… ¿treinta, cuarenta o más? Pocos mártires para tantos cobardes y miserables… si rehacemos la pregunta… ¿Cuántos obispos van a estar dispuestos a dar sus vidas por Cristo y por SU Iglesia, la verdadera?

Ni medio, contrasta, también, con la Iglesia española de 1936 donde cientos de sacerdotes, monjas y obispos, es posible que millares, sufrieron martirio y, además, conformes, contentos y orgullosos por dar sus vidas por Cristo Nuestro Señor.

Seguimos haciendo preguntas ¿Cuántos de esos obispos españoles estarían dispuestos a sufrir martirio por nuestra FE?

En 1936 mientras Obispos y religiosos eran torturados, violados y asesinados los supervivientes se alinearon con la FE de Cristo sin vacilar. Me recuerda mucho la postura de los obispos actuales cobardes, asustados y sin valor. El término valor no se refiere a la valentía que, seguro que NO la tienen, sino a esos falsos valores que la sociedad pervertida considera como ideología suprema…

La masonería infiltrada y sus amos sionistas poco a poco cambian la esencia y substancia de la religión católica, rebajando la autoridad papal y transformando el sacrificio de la Santa Misa que es el sacrificio de nuestro Redentor por un servicio de entrega de la comunión.

Para ser Obispo católico no sirve ni saber mucha teología, ni filosofía, ni muchas leyes sino de ser inteligentes, perspicaces, estudiosos de la verdad, cuando lo que se pide en una FE inquebrantable y unas dotes de mando firmes sin fisuras.

En cuanto al pueblo, aborregado y sin mayores conocimientos doctrinales, siempre tiende a seguir a sus inmediatos seguidores. En estos tiempos de herejía necesitamos obispos de FE firme y férrea y valientes dispuestos a ser mártires.

La tendencia del pueblo con escasos conocimientos es, por desgracia, seguir en manada a sus obispos o lo que sean, sin hacerse preguntas.

Entre los obispos nuevos y actuales en su mayor parte descreídos y acompañados por unos medios de comunicación perversos y mentirosos, el pueblo si se le reemplaza su religión por otro sucedáneo, lo acepta o lo aceptara. El hombre democrático y occidental, de derechas y supuesto católico de corte liberal va en camino directo hacia una programación prevista, preparada y reprogramada con el asentimiento de los obispos y, casi seguro, por la cúpula vaticana.

El padre Bruckberger dominico entre teólogo y filósofo pero clarividente comparaba a la Iglesia con una empresa en quiebra que se enfrenta a dos alternativas o camuflar su balance o dedicarse a otra actividad:

Al final se adopta la solución de cambiar el producto actual, la FE de Cristo, por un nuevo producto, la religión de Lucifer, producto que asegurará la reconversión y el porvenir de la empresa.

Bruckberger, puede que fuera el primero en desenmascarar al Concilio Vaticano II y lo describe como un complot de tecnócratas dentro de la Iglesia:

Cualquiera que haya sido la intención de Juan XXIII y Pablo VI – y según él la intención carece de importancia con lo que ha sucedido y sucede en la realidad es que hubo un complot que califica como de tecnócratas – ¿casualidad? – dentro de la Iglesia para con el camuflaje del Concilio cambiar la religión católica, y cambiándola de forma discreta pero asegurándose de que su substancia cambiaria.

Ese complot el dominico suizo lo denuncia muy repetidas veces y sin cansarse.

Alain Woodrow en su libro La Iglesia destrozada, escribe:

El cristianismo se encuentra hecho migas, troceado como consecuencia de cismas religiosos y políticos que han ocurrido a lo largo de su historia; se encuentra en fase de disolución por la acción corrosiva de las ciencias humanas y transformándose en un folklore de la sociedad actual. Desde el punto de vista humano, está muy bien visto y, además, es incontestable.

En definitiva, se puede decir que la Iglesia va bien, incluso muy bien…

La realidad a pesar de que los regentes sigan expresando que todo va bien y que la iglesia de Roma goza de excelente salud, se encuentra corroída por un cáncer terminal metastásico que, por supuesto, nunca lo van a reconocer hasta que llegue ese momento crucial que señala San Pablo en que aparecerá, de golpe y porrazo un nuevo dios, una nueva religión, la de Lucifer.

Nueva religión que se tragará a sus obispos y a sus cardenales que seguirán asegurando y negando el cáncer hasta que todos ellos se marquen con el número 666, el de la bestia…

Una parte de su pueblo resistirá, resistiremos por la Gracia de Dios, la inspiración del Espíritu Santo.

Respecto a la reforma de la Liturgia, Bruckerberger se expresa;

Se puede decir con claridad que la reforma litúrgica consecuencia del Concilio Vaticano II es un fracaso. Incluso los agnósticos cuando acuden a bautizos, comuniones o matrimonios de católicos, se sienten desconcertados. Mientras tanto los obispos imperturbables. Aristóteles decía que no hay nada en la inteligencia que antes no haya venido del significado y lo que procede de la sensibilidad sobre todo si viene de hace mucho tiempo, debe de ser modificado con la mayor prudencia…

Gracias por la lectura

Sagrado Corazón de Jesús en Vos confío

DIOS, PATRIA y REY LEGÍTIMO

 

Íñigo Caballero